Seguramente esta es una pregunta que en este inicio de curso que como madres/padres nos la hemos hecho varias veces.

Antes que nada, habría que plantearse una pregunta ¿por qué apuntamos a los niños a estas actividades? 

Las respuestas habituales a esta pregunta suelen ser varias: o bien porque a nosotros nos encaja con nuestro horario laboral,  o bien porque pensamos que el niño necesita aprender cuantas más cosas mejor o bien porque en dichas actividades extraescolares, el niño está haciendo algún tipo de actividad que no es posible realizar en la escuela.

Es importante saber que las actividades extraescolares deben ser opcionales y flexibles y acordadas entre nuestros hijos y nosotros: la única razón que debería motivarnos a apuntar a nuestros hijos  a una extraescolar es que el niño  desee hacer la actividad.

¿Cuáles son las mejores actividades extraescolares?

No hay actividades extraescolares mejores o peores. Hay niños a los que les gusta una cosa o les gusta otra. O incluso hay actividades muy mal planteadas que consiguen que el niño pierda el interés en algo que antes le fascinaba. Además, no tenemos en cuenta que para que el niño aprenda, lo principal es que juegue.

El aprendizaje se consolida y es mucho más efectivo cuando hacemos algo desde el placer. Piaget, psicólogo del desarrollo explica que aprendemos mejor cuando lo vivimos.

¿Qué habilidades deben fomentar las actividades extraescolares?

Las actividades extraescolares deben ser percibidas por el niño como juego. El juego es esencial para el desarrollo de los niños.

Tal como dice Anna Forés Miravalles, pedagoga española dice que el juego es una herramienta indispensable para que los niños aprendan y desarrollen aptitudes que les ayudarán a enfrentarse a la vida cotidiana a la vez que fomentan la motivación, la habilidad para solucionar problemas, y maneras sencillas de afianzar conocimientos.

Por lo tanto, no pensemos que el niño está perdiendo el tiempo cuando juega, no le apuntemos a multitud de clases extraescolares que no desea realizar, le ahoguemos en deberes, le exijamos un aprendizaje intelectual.

¿Qué criterios debemos tomar para escoger una actividad extraescolar?

Antes de lanzarte a llenarle la agenda de cosas tienes que tener en cuenta una serie de consideraciones:

• ¿Cuál es el objetivo? Algunos padres apuntan a sus hijos a extraescolares solo por tenerlos ocupados por las tardes. Esto es un gran error, ya que estamos obligando a nuestros hijos a hacer algo que probablemente no quieran hacer. Aun así, si nos vemos en este caso, lo mejor que podemos hacer es dejarlos que elijan por sí mismos. Que se apunten a la actividad extraescolar que ellos quieran.
  
  
• Equilibra las actividades: no todo puede ser productividad y aprender cosas prácticas. Está muy bien apuntarse a clases de inglés o de refuerzo, pero también tiene que haber un momento para la diversión, los deportes siempre son una buena idea. Y no importa si son físicos o deportes virtuales como e-sports o juegos de mesa.
  
  
• ¿Qué le gusta hacer a  mi hijo? Tienes que tener en cuenta que no todas las recomendaciones y actividades sirven para todo el mundo. Habla con tus hijos antes de empezar cualquier actividad extraescolar, se empático y piensa qué puede ser realmente beneficioso para él.
  
  
• ¿Cuáles son las necesidades? Es fundamental hacer solo aquellas actividades extraescolares que realmente se necesitan. En el momento en el que estamos practicando algo que no nos divierte y no nos enseña estamos cometiendo el gran error de las extraescolares.
  
  
• ¿Cuántas horas hay que dedicar a hacer  actividades extraescolares? Cada niño es un mundo y no debes tomar los datos al pie de la letra, aunque los expertos hablan de entre 3 y 4 horas semanales como la medida perfecta. Por supuesto, esto dependerá de cada niño, de su motivación y ganas de realizarlas. Siempre hay que tener en cuenta que la carga de extraescolares no deben minar el rendimiento escolar del niño.

¿Qué beneficios aporta el realizar actividades extraescolares?

Organización y responsabilidad: es importante que desde muy pequeños sean capaces de organizar su propia agenda. Aunque tu lo supervises y les ayudes, pero forma parte del aprendizaje poder combinarlo todo, colegio, deberes extraescolares…

• Garantía de salud: algunas actividades, sobre todo el deporte para niños aseguran tener una buena salud. Pero mantener la mente ocupada y activa es una garantía de estar siempre sano.
  
  
• Aceleración del aprendizaje: puede ser un refuerzo para aquellos que vayan un poco mal en los estudios y para aquellos que quieran aprender cosas nuevas será una forma de avanzar a un ritmo más rápido y mejor.
  
  
• Estimulación y diversión: hay que tener en cuenta la salud mental de nuestros hijos. Aunque pensemos que son unos vagos y que nunca tienen ganas de hacer nada hay que estimularlos de alguna forma. No podemos dejar que se aburran y que caigan en la pereza, hay que ayudarlos a divertirse y a mantenerse activos.
  
  
• Socialización: hacer nuevos amigos o amigos distintos a los que se hacen en el colegio es un gran motivo para hacer extraescolares. Puede que conozca a gente que cambie su vida para siempre y esto puede ser genial si lo apuntamos a actividades distintas.

Y sobre todo recuerda:  Las extraescolares han de servir para complementar el proceso educativo de la escuela y de casa, ofrecer aquello que en su vida escolar no puede disponer y que les ayudará a crecer como personas.